¿Está muriendo Twitter?

10 Nov ¿Está muriendo Twitter?

Twitter está siendo el protagonista en las noticias de estos últimos días, en relación a su situación financiera: despido del 9% de la plantilla, cierre de su plataforma de vídeos Vine, desplome del precio de sus acciones…

A esto hay que sumarle que el pasado 7 de noviembre, Twitter sufrió una caída de su servicio y estuvo inaccesible durante aproximadamente dos horas, debido a un ataque DDoS que afectó a otras compañías como Spotify o el diario The New York Times.

Esto nos hace preguntarnos: ¿Qué está ocurriendo con Twitter? ¿Ha dejado de ser una red social de interés para los usuarios? ¿Qué podemos hacer las marcas que tenemos presencia en Twitter?

Motivos por los que Twitter ya no es lo que era

Cuando Twitter fue creado, sus fundadores tenían una visión muy distinta del uso que se le debía dar a su propia red social: Jack Dorsey concebía Twitter como un método para publicar actualizaciones de estado personales; Evan Williams lo veía más como un método de difusión de noticias; y Noah Glass veía a Twitter como una red social de conversación entre amigos.

Lo cierto es que Twitter ha sido todas estas cosas a la vez, dependiendo del uso que cada persona le haya querido dar a su perfil; pero también se ha convertido en algo con lo que los fundadores no contaban: un caldo de cultivo de trolls.

La principal característica que define a Twitter es su simplicidad, traducida en la limitación a 140 caracteres de sus publicaciones. El propósito de esta limitación era facilitar una conversación fluida, y poder estar al día de multitud de temas con un simple vistazo a tu timeline. Sin embargo, este tipo de mensajes tan escuetos ha dado lugar a todo tipo de malentendidos, discusiones e incluso insultos, a veces desde el desconocimiento.

Pongamos que un usuario publica en Twitter un enlace a un análisis de una película de estreno, indicando que le da una puntuación de 6 sobre 10. Es muy habitual recibir todo tipo de críticas e insultos por haber puesto lo que algunos consideran una nota baja, cuando la mayoría de esos usuarios ni siquiera han pinchado el enlace para ver el análisis, en el que, aunque se le haya puesto un 6, se abalan numerosas virtudes de la película.

Han habido numerosos casos de personalidades públicas que han tenido que denunciar a la policía el acoso sufrido a través de mensajes de Twitter. Algunos colectivos, como el de los judíos, los negros, o las mujeres, sufren también a diario este tipo de conducta en Twitter, y aunque sus responsables intentan controlarlo cerrando las cuentas de los acosadores, éstos rápidamente se hacen una nueva y siguen con su actitud.

Otro de los aspectos que mata a Twitter poco a poco es la automatización. Muchos usuarios configuran bots en su perfil de Twitter, para que realicen automáticamente todo tipo de acciones:

• Seguir, dar Me gusta o añadir a una lista a un usuario que publique un Tweet usando un determinado #hashtag
• Publicar automáticamente un Tweet cada vez que un blogger publique un nuevo artículo
• Seguir determinados perfiles con la intención de que te devuelvan el follow, y si no lo hacen en unos días, dejar de seguirles.

Todas estas prácticas son habituales entre todo tipo de usuarios, y aunque pueden parecer muy útiles a primera vista, acaban desvirtuando la naturaleza de la red social. Twitter, como cualquier red social, está hecha para que interactúen personas entre sí, no robots.

¿Qué utilidad tiene que un perfil le de me gusta a tu publicación, si ni siquiera la ha leído? ¿O de qué te sirve tener 100 nuevos seguidores, si 90 de ellos no hablan tu mismo idioma? Son situaciones que se dan a diario en Twitter, y hacen que pierda la utilidad para la que fue concebido.

¿Qué podemos hacer las marcas?

¿Significa todo esto que podemos olvidarnos de Twitter, y dejar de tener presencia en esta red social? Nosotros pensamos que no. Twitter sigue siendo útil para que las marcas difundan su mensaje entre su público y entren en conversación con ellos, pero debido a todos los problemas que la red social sufre actualmente, toda marca debe seguir los siguientes consejos:

• Automatiza sólo lo necesario: en la medida de la posible, gestiona tu cuenta de marca de manera manual, leyendo las publicaciones de tus seguidores e interactuando con ellas. Comparte, contesta y responde a otros usuarios, ¡para eso están las redes sociales, para interactuar con otros!
• Cuando compartas contenido de otras fuentes, hazlo siempre tras haber leído dicho contenido, y pregúntate si a tu audiencia le puede resultar de interés. Ten en cuenta que todo lo que compartas en tu perfil afecta a tu reputación como marca, por lo que sé cuidadoso con ello.
• Diversifica tu presencia en redes sociales: analiza en qué otras redes puedes estar presente y lánzate a entablar conversación en ellas, siempre acorde con tus recursos y presupuesto. Ten en cuenta que las redes sociales son modas que van pasando, por lo que debes ir adaptando tu marca a dichas modas. Actualmente están funcionando muy bien Instagram, y Snapchat para un público algo más joven.

¿Y tú? ¿Piensas que Twitter tiene los días contados como red social? ¿En qué red social piensas invertir tus esfuerzos de comunicación a partir de ahora? Nos encantaría saberlo: ¡cuéntanoslo en los comentarios!